Por: Mario Sotelo

A lo que se refiere a Guanacaste la Anexión del Partido de Nicoya, que se dió el 25 de julio de 1824, es un hecho histórico relevante, por su aporte a Costa Rica desde el punto de vista geográfico, económico y cultural. Ya desde 1835 se había creado el Departamento de Guanacaste formado por el Partido de Nicoya y los valles de Bagaces y Las Cañas. Los territorios del actual Abangares eran parte de Cañas administrativamente.

Sin embargo, existió desde la Época Precolombina, una unidad cultural y territorial en constante consolidación en lo que hoy es Guanacaste y parte de Puntarenas. Reinados y cacicazgos definieron fronteras de dominación. 


Territorios de la Gran Nicoya, con la manifiesta Cultura Chorotega, estuvieron enriquecidos con distintas agrupaciones aborígenes, entre ellas las de los corobicíes, a la que pertenecía el Cacique Avancari. 

De raíces mesoamericanas, hablaban la lengua Náhuatl lo cual existen registros de la Época de la Conquista de Gil González Dávila en 1522, de haber visitado al Cacique en sus dominios en Abangaritos. 

Ya consolidada la Época Colonial, se establecen las grandes haciendas ganaderas. Sin embargo, más allá del Rí unoo Tempisque, en las llanuras de su cuenca baja, también se establecen haciendas de ganado, en lo que sería las tierras bajas de Cañas y Bagaces, que eran parte administrativamente de Costa Rica. 


Abangares fue escenario de la presencia de enormes haciendas, entre ellas La Palma y La Culebra. Por lo tanto, comparten tradiciones relacionadas con el ganado y las vivencias en la hacienda, con el sabanero, la cocinera, las comidas basadas del maíz, herencia ancestral precolombina, la cuajada, el horno de barro, compartiendo la riqueza del Golfo de Nicoya! 

La Época Colonial marcó la historia de Abangares con el predominio de las haciendas, parte geográfica de la Cuenca Baja del Tempisque. 

Una unidad que demuestra que esos lazos son indestructibles y asidero de la conformación de un núcleo poblacional que originó los pueblos de la bajura abangareña! 


Lo de





las minas de oro y la llegada de inmigrantes del Valle Central Occidental, vendría después de la Anexión, en 1884. Así se modela la rica identidad de una zona privilegiada por la naturaleza y fortalecida con la heterogeneidad de una población de migrantes, que imprimieron su sello abangareño, ligado a la provincia de Guanacaste, sin olvidar las raíces culturales, herencia ancestral de los primeros colonos, llegados de Cañas, Nicaragua, Bagaces y Nicoya, muchos de ellos mulatos, que dan su aporte en el poblamiento de la partes bajas cercanas al Golfo de Nicoya! 

Doscientos años de historia con sus manifestaciones locales, que no podemos invisibilizar, porque la suma nos da por resultado una provincia más fortalecida en su identidad, que también enriquece a Costa Rica,  que abrigó al original Partido de Nicoya.